Bodegas Lalanne
Cuando pensamos en Huesca nos viene enseguida a la mente el Pirineo, la nieve, el esquí, pero en Huesca hay mas cosas, como las bodegas del Somontano.
Recientemente estuvimos visitando Bodegas Lalanne, una centenaria bodega familiar con origen en Burdeos. Esta bodega fué fundada en 1842 por Francisco Lalanne y su esposa Juana Felicia Lataste en Burdeos. Hubo una epidemia de filoxera que asoló la mayor parte de las viñas europeas por lo que en 1894 decidieron emigrar, y desde entonces están en el Somontano, junto a Barbastro.
En Barbastro compraron la Finca San Marcos y comenzaron a plantar viñas traidas de Burdeos, variedades como Cabernet Sauvignon, Merlot, Syrah, Pinot Noir, Chardonnay... todos ellos sobre pie americano para evitar la filoxera, por lo que a la finca le empezaron a llamar "Torre del Americano".
Todas estas nuevas variedades se han ido adaptando perfectamente al clima del Somontano, y hoy en dia se cultivan junto a las variedades locales de Tempranillo y Macabeo.
Seis generaciones después se sigue elaborando vino de calidad.
Leonor Lalanne nos hizo una visita amena y entretenida, nos fue contando tanto la historia de la bodega como las curiosidades propias de la elaboración del vino. Tienen un pequeño museo donde se ve la evolución de la elaboración del vino y una selección de botellas antiguas de colección, tanto de su propia bodega como de las bodegas que han ido visitando y conociendo a través del mundo.
Nos resultó muy curiosa la explicación sobre la fermentación en la propia botella para elaborar el brut. Y también aprendimos que para que un vino espumoso (denominación que no gusta nada a Leonor) sea de calidad tiene que ser Brut Nature, tomamos nota!
En la sala de barricas nos explicó el proceso de la elaboración de los crianzas y reservas. Estos vinos, después de la fermentación del mosto pasan un tiempo en cuidadas barricas de roble francés, que son fundamentales a la hora de elaborar los vinos mas especiales.
Tienen un patio de bodegas precioso donde nos dijeron que realizan bodas y eventos.
La visita termina con una cata de una selección de sus vinos que nos resultó muy amena. Empezamos por un vino blanco, muy curiosa la explicación de mirar la copa sobre un fondo blanco, cambia totalmente la percepción del color del vino. El aroma con la copa parada o después de moverla un poco, la percepción de los sabores en boca mientras mantenemos el vino en ella, muy curioso como cada persona nota un sabor, desde flores, distintas frutas, etc. Continuamos con un crianza y después un reserva.
Al finalizar pasamos por su pequeña tienda para adquirir algunos vinos y ¡sorpresa! nuestra guía Leonor, además de ser una muy buena comunicadora es escritora. Por lo que salimos de la bodega felices después de haber realizado una visita muy amena con unos vinos y libros, ¡qué mejor combinación que un buen libro y una copa de buen vino! Del libro os hablaremos mas adelante, estamos en proceso de leerlo ;)
Si os acercáis al Somontano os aconsejamos que realicéis la visita a las Bodegas Lalanne, ¡no os defraudará!
¿Conocéis la zona del Somontano? ¿Habéis estado en alguna de las bodegas de la zona? ¡Contadnos vuestra experiencia!